Hace poco Arsenio Escolar reflexionaba sobre el lenguaje utilizado por los medios en sus crónicas deportivas.
Los excesos de algunos periodistas pueden divertir a algunos y molestar a otros.
En lo personal, cualquier exceso cometido por un medio de comunicación me incomoda, porque, en pos de la espectacularidad, se deja en el camino alguna consideración ética y hasta humana.
Ayer no pude seguir la final del europeo de baloncesto en el que España cayó dramáticamente frente a Rusia, pero lo que pude ver fue al enjambre de fotógrafos captando imágenes de los abatidos jugadores españoles sentados en la pista, después de la derrota.
Por supuesto que el deber de los fotógrafos es captar un testimonio gráfico de los acontecimientos que cubren, pero algunos hicieron sus imágenes prácticamente sobre los jugadores y en posiciones de contorsionistas, dándole al ambiente de tristeza y frustración del equipo derrotado un toque innecesariamente grotesco.
La realidad de la derrota se captaba perfectamente desde cualquier sitio de la pista, no había necesidad de buscar ángulos imposibles para resaltarla.
Mis respetos para todos los chicos de la selección española, especialmente para Pau Gasol, quien soportó estoicamente la tremenda presión mediática.
Tags: PR, RRPP, Public Relations, Relaciones Públicas, Comunicación Corporativa, Corporate Communications
No hay comentarios:
Publicar un comentario