En la televisión se da un curiosa paradoja: el gasto en publicidad durante las horas de máxima audiencia se ha venido incrementado a una tasa del 40% anual durante la última década; en ese periodo, los espectadores han descendido en casi un 50%, por lo que la consecuencia es que se paga más a cambio de llegar a menos espectadores, aumentando el coste por usuario. Algo similar ha sucedido en los otros dos medios tradicionales, la prensa y la radio.
Es evidente que la eficacia de la televisión, la prensa y la radio para informar e influir en el público ha decaído ante otros medios y canales de comunicación que están alcanzando rápidamente una sólida madurez, sobre todo en los países que gozan con alta penetración de la tecnología entre amplias capas de su población.
Desde mi punto de vista y experiencia, esta influencia se ve limitada sobre todo en la consecución de objetivos publicitarios, no necesariamente en la capacidad de informar y formar opinión a través de los contenidos editoriales de estos medios.
Es decir, ni la TV, ni la prensa y tampoco la radio fenecerán como medios de información, aunque tendrán que replantear su modelo de negocio debido a su ineficacia como plataforma publicitaria.
Ante esta situación, una alternativa, además de la utilización de esos medios y canales alternativos, está en el aprovechamiento de las relaciones públicas para informar e influir en el público.
La gente hace zapping cuando lo que ve en la TV o escucha en la radio no le interesa. Pasa de los anuncios en la prensa y hasta bloquea los pop ups en internet.
Pero cuando llega el momento de ver su programa preferido la gente se relaja y pone atención. Ahí es donde pueden llegar las relaciones públicas, contribuyendo con información relevante a los contenidos del programa o de un texto.
¿Se trata de una manera de manipular? Sostengo que no, puesto que los medios insertan estos contenidos de manera libre e independiente, sólo atendiendo a que la información que le haya sido facilitada sea una auténtica noticia, que sea de interés de su público.
Mientras que el sector publicitario lleva varios años con crecimientos bastante limitados, las RRPP continuan con un vigoroso crecimiento que no tiene visos de agotarse próximamente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario